Ayer día 11 de diciembre vencía el plazo que la Fiscal de Igualdad de Andalucía, Flor de Torres, había concedido al Patronato de la Fundación Diocesana de Enseñanza Santa María de la Victoria, de Málaga, para que acatara las pautas indicadas por la propia Fiscalía referentes al caso de la menor transexual y el Colegio San Patricio. Como se podía prever, Francisco José González, secretario de esta Fundación, hizo ayer unas declaraciones a la prensa por las que se negaba a cumplir con las directrices marcadas tanto por la fiscal como por la Delegación de Educación.
Estas instrucciones dirigidas a permitir el libre desarrollo de la personalidad de la menor, derecho humano fundamental que recoge tanto la Constitución Española como el Estatuto de Autonomía de Andalucía, exigían:
- Tratar a la niña en femenino: no es suficiente con tratarla con un nombre neutro como Gabi, para luego dirigirse a ella en masculino (Gabi, majo, no seas travieso).
- Permitir que utilice los aseos y vestuarios de niñas: pretender que utilice un baño para discapacitados es una discriminación de manual.
- Permitir que pueda acudir al colegio con ropa y uniforme femeninos: ir siempre con chándal cuando el resto de las niñas de la clase puede utilizar el uniforme también es claramente discriminatorio.
«Es lo que esperábamos», declara Eva Witt, presidenta de Chrysallis, Asociación Estatal de Familias de Menores Transexuales, «y más después de las declaraciones del secretario de la Fundación que afirmaba que estaban dispuestos a recurrir cualquier orden judicial que pretendiera obligarles a respetar la identidad de la niña. También la maniobra, por parte de la Fundación, de acudir a la Fiscalía General del Estado para apartar del caso a la Fiscal Flor de Torres, nos daba clara muestra de cuáles eran sus intenciones y cuál sería su decisión final. No nos equivocábamos».
La Fiscal Flor de Torres aseguró a los padres de la menor que denunciará a la Fundación por discriminación por razón de identidad de género, así como por utilizar documentos privados y secretos concernientes a la niña y a otros menores. Esta documentación fue cedida por la Fiscalía con la advertencia de que únicamente podía ser utilizada como información para la toma de decisiones por parte del Patronato y que después deberían ser destruidos e inutilizados.
Asimismo, la Delegada de Educación, Patricia Alba, ha declarado que ya no se va a esperar más. El mismo Consejero de Educación de la Junta de Andalucía le ha dado luz verde para que la delegada actúe contundentemente.
Esta tarde se celebrará una Junta Extraordinaria del AMPA del Colegio San Patricio para decidir qué postura tomarán los padres sobre esta situación. Para evitar la caza de brujas, la Delegación ha decidido enviar un inspector de Educación para que levante acta de la reunión. Javier Madrid, inspector de zona, se ha puesto en contacto con los padres para apoyarlos y les ha aconsejado que no duden en llevar a la niña con su uniforme femenino, si así lo creen conveniente, pues él mismo se encargaría de que se respetase esta decisión.