Hoy 17 de mayo, como cada año desde el 2004, se celebra el día internacional contra la LGTBIfobia con la esperanza de que estamos construyendo un mundo mejor y una sociedad más justa, pero no con la rapidez que nos gustaría ya que seguimos viendo como diariamente se vulneran los derechos de muchas personas, y se las discrimina por su orientación afectivo-sexual, identidad y/o expresión de género. Con la consolidación de sistemas que siguen facilitando y perpetuando todas las injusticias y opresiones que las personas del colectivo LGTBI sufren históricamente. Todo se ha agravado por la crisis que estamos sufriendo a nivel mundial, debido al virus de la COVID-19 y por los virus que extiende y contagia la extrema derecha y las mal llamadas feministas radicales trans excluyentes, terfs, que realmente no les vemos nada de feminismo en un discurso que violenta y discrimina negando la identidad de muchas personas, que han hecho aumentar gravemente las agresiones y discriminación que sufren las personas trans, debido a sus discursos peligrosos y llenos de desinformación, que, sin duda, incitan al odio.
¡Ha sido un año muy duro para el colectivo LGTBI, está siendo muy duro para el colectivo LGTBI!
Desde Chrysallis hemos visto un aumento de la violencia y el desamparo en el ámbito familiar debido a la pandemia. Tutores y familiares que no han apoyado, o peor, han maltratado físicamente y psicológicamente a sus hijes. Al mismo tiempo, tenemos que luchar contra el intento de invisibilizar a las personas LGTBI en nuestros centros de educación con el PIN parental, el auge de la desinformación y los ataques a las personas trans con los mismos argumentos que se usaban para negar derechos a las personas gays, lesbianas y bisexuales hace treinta años. Argumentos que atentan contra los derechos humanos y han ido dirigidos contra las personas trans, y especialmente a nuestra infancia y adolescencia trans.
En ocasiones, por un interés político, otras veces simplemente por LGTBIfóbia, por no perder privilegios y por no tener nada de empatia ni respeto por nosotres, la mayoría de las veces por ambas razones.
Argumentos que muy a nuestro pesar escuchamos con gran decepción y preocupación por parte de la Vicepresidencia primera del Gobierno de Coalición, la Sra. Carmen Calvo, a la que hemos visto firmar un manifiesto con indudables tintes tránsfobos y realizar declaraciones públicas, en las que en aras de una supuesta y nada real “seguridad jurídica”, pone en cuestión el derecho a la identidad de las personas trans, así como la necesidad de tutelarlas, situándolas ante parte de la opinión pública en presunción de fraude, demostrando por su parte una y otra vez su falta de “voluntad política” ante la gran oportunidad de legislar por los derechos humanos de las personas trans, y situando a España como un país de referencia en cuanto a la igualdad y libertad de su ciudadanía a ser y expresarse sin miedo a la exclusión, al señalamiento, a la discriminación más absoluta.
A pesar de todos los problemas, obstáculos y ataques, seguimos luchando por la igualdad y justicia social del colectivo LGTBI, de las personas trans, de nuestres hijes, y por el derecho a la libre autodeterminación independientemente de la edad. Trabajamos con organizaciones LGTBI de todo el país, llevando la bandera #ExigimosLaIgualdadTrans por todas las comunidades autónomas y recibiendo el apoyo de todas las instituciones por una ley que asegure el respeto de los derechos humanos de la persona trans en el estado español, que sea de referencia y ayude al progreso de los derechos LGTBI en el ámbito internacional. Luchar contra la LGTBIfóbia y los sistemas que oprimen al colectivo LGTBI, es una cuestión que nos afecta a toda la ciudadanía, es positivo para el progreso como sociedad en todos los ámbitos, y sobretodo es una cuestión moral, de justicia social y de derechos humanos. ¡Sigamos luchando, esto no termina!
¡Fuerza y amor, mucho amor!